lunes, 10 de octubre de 2011

  La brújula es un instrumento que indica el rumbo, empleado por marinos, pilotos, cazadores, excursionistas y viajeros para orientarse. Hay dos tipos fundamentales de brújula: la brújula magnética, que en versiones primitivas se utilizaban ya en el siglo XIII, y el girocompás o brújula giroscópica, un dispositivo desarrollado a comienzos del siglo XX. En la brújula magnética el rumbo se determina a partir de una o varias agujas magnetizadas que señalan al polo norte magnético bajo la influencia del campo magnético terrestre. El girocompás, consiste en un giróscopo cuyo rotor gira alrededor de un eje confinado al plano horizontal de forma que dicho eje se alinea con la línea Norte-Sur paralela al eje de rotación terrestre, con lo que indica el norte verdadero.

BRÚJULA MAGNÉTICA ANTIGUA.

                                  BRÚJULA MAGNÉTICA MODERNA.





BRÚJULA GIRÓSCOPICA.

       

EL ORIGEN DE LAS BRÚJULAS:
 Poco se sabe sobre el origen de la brújula, aunque los chinos afirman que ellos la habían inventado más de 2.500 años antes de Cristo.Los chinos usaban un trocito de caña conteniendo una aguja magnética que se hacía flotar sobre el agua, y así indicaba el norte magnético.

                  BRÚJULA CHINA.

Hay diversas teorías sobre quién inventó la brújula. Ya en el siglo XII existían brújulas rudimentarias. En 1269, Pietro Peregrino de Maricourt,
 describió y dibujó en un documento, una brújula con aguja fija.

Otros historiadores señalan que la primera brújula de navegación práctica fue inventada por Flavio Gioja, entre los siglos XIV y XV.
 Más tarde apareció la "rosa de los vientos", un disco con marcas de divisiones de grados y subdivisiones, que señalaba 32 direcciones celestes, y que fue la brújula marina que se utilizó hasta fines del siglo XIX.              

                               
                                   ROSA DE LOS VIENTOS.




Posteriormente se logró un nuevo avance, cuando el físico inglés Sir William Thomson logró independizar a este instrumento, del movimiento del barco durante tempestades, y anuló los efectos de las construcciones del barco sobre la brújula magnética.

En los comienzos del siglo XX aparece la brújula giroscópica o girocompás.


En el siglo VI a.C., se descubrió (por un pastor según cuenta la leyenda) que cierta clase de mineral atraía al hierro. Como fue hallado cerca de la ciudad de Magnesia, en Asia Menor, se llamó piedra de Magnesia, y el fenómeno se denominó magnetismo. Éste fue estudiado por primera vez por Tales de Mileto. 

En 1180, el sabio ingles Alexander Neckam fue el primer europeo que hizo referencia a esa capacidad del magnetismo para señalar la dirección.